El
dijo:
io
me pongo el vestido de plata,
ese
ke tú jamás.
También dijo:
io
pondré la músika,
i ésta
la estancia
del kuepo sólo será,
sólo será.
Pero
no hai vestidos aká, le dije de vuelta
ia
todos los kemé.
Ya no hai vestidos aká.
La
noxe sonaba a aurora i rekordamos al tal Nietche.
Sonreímos
de ke hubiera la mala vida pagado por
todes
nosotres.
Tú seguías kon lo del vestido,
la
kancion, la noxe, espumas, la kadencia
el mar, mar, mar.
Kon kuanta espesura se allegaron los rekuerdos para olvidar,
porke, rekuerdas ke no ibamos seguras de nada?.
Kaíamos.
intencionando.
Kuanto
nos reiamos de la nada ulterior,
esa profundidad alkanzada, nada eramos,
tal kual ahora pero kon otros
rojos, kizás.
No
alkanzarán las distancias sobre nosotres
sé ke lo sabes,
por
eso miro tus ojos i tu a los míos realzas altivos.
Los
movimientos son los ke deben.
La
enkrucijada nos hace visibles
en
la oskuridad ke hallamos iluminada
o
mustia.
Enkarnas
la fixión de un momento inesperado.
Entre
broma i broma
entre
pelo i pelo
entre
medio i medio.
De:
<<Viajes a ninguna Parte>>
Lobx Au Au
20 Enero 2014
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